Fellini pasa los cinco años del instituto secundario de humanidades en el Palacio Gambalunga en las salas de la biblioteca. En aquella época, la entrada estaba en Via Tempio Malatestiano. Titta Benzi recuerda una clase que estaba en el último piso, casi una buhardilla, en la esquina entre Via Gambalunga y Via Tempio Malatestiano.